miércoles, 4 de mayo de 2011

''ENFANT TERRIBLE''


Alexander McQueen: más que un diseñador

Tres motivos por los que recordar a Alenxander McQueen, ese genio entre los genios:

Por su capacidad de vender lo que diseñaba, no al revés: Alexander McQueen cambió el mundo de la moda, principalmente, porque fue una de esas pocas personas que, con su genio, visión y talento, logró obligar a renovarse a un mundo que de innovador no tiene todo lo que se cree. En un negocio que ante todo debe rendir cuentas,  su gran talento fue convertir el conocimiento severo e inflexible en innovación; En dar vuelta una formación estricta en moda, nacida del rigor de la clase obrera y ganada en la tradicional cuna de la moda masculina Saville Row a, básicamente, llevar a cabo todo lo que en su cabeza se transformaba en obsesión.
Su atención casi sicótica a los detalles, la imaginación desbordante  y la certeza de que no existen límites (porque en su caso, no lo había) daban como resultados prendas -y shows, pero de eso hablaremos después- que para los críticos y los amantes de la moda era imposible no atesorar y recordar. Quizás porque nunca perdió el balance entre lo bello y lo horroroso, entre lo crudo, sucio y lo sublime, que nunca perdió su escencia principal, a pesar de que entre sus inspiraciones e intereses se encontraban tópicos tan diversos e inabarcables como la sicología, la muerte y el arte.

Porque le devolvió el protagonismo del mundo de la moda al Reino Unido: Ya quisiera saber lo que sería de la moda británica hoy si McQueen no hubiera entrado en la escena,  destrozando y rearmando todo, en los noventa. Quizás, Jonathan Saunders, Marios Schwab, Matthew Williamson, y toda la camada actual que nos han mantenido encantados a todos por años se hubiera formado de igual forma a la sombra de Galliano (quizás el único diseñador inglés que puede hacerle el peso en la moda contemporánea), pero creo que gran parte de lo que es hoy Inglaterra para el mundo de la moda -el lugar donde las tendencias se crean y no se siguen, el primer lugar donde todo pasa- seria imposible siquiera de imaginar sin la influencia de McQueen. Desde su entrada a la mundo de la moda, con su estampa dePunk rocker, de hooligan, de enfant terrible, inmediatamente, y para siempre, la isla quedó teñida para siempre de rebeldía y vanguardia, continuando el legado de Vivienne Westwood y del mismo Galliano.

Por sus shows en vivo: “Nadie que haya asistido alguna vez a un desfile de McQueen puede pensar que la moda es superficial”…Creo que esa frase es la que mejor refleja la puesta en escena del genio McQueen. Escuelas desalojadas en París, lobos, cubos espejados gigantes, modelos caminando sobre el agua… nada era suficiente para representar el concepto que McQueen imaginaba en su cabeza, haciendo que todos y cada uno de sus desfiles fueran los más comentados de cada temporada.  Una tras otra, las puestas en escena de McQueeen se confirmaban como las más espectaculares, sin embargo, es sin duda injusto referirse a ellas sólo como grandes aparatajes pirotécnicos, porque siempre fueron, por sobre todo, el lazo, la conclusión y la muestra final de las ideas que Alexander McQueen tenía en la cabeza, y  que sólo por instantes compartía con el resto del mundo.






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